Etiquetas
Ediciones Gigamesh, Kelly Robson, Lenguas maternas y otros relatos, Maria Dahvana Headley, S. Qiouyi Lu, Simone Heller, Vandana Singh
Siguiendo con la entrada anterior, sobre La vida secreta de los bots y otros relatos, me gustaría hablar también del segundo volumen de relatos que la editorial Gigamesh ha seleccionado a partir de The Best Science Fiction and Fantasy of the Year, antología que realiza Jonathan Strahan para ofrecernos lo mejor del año. Este segundo volumen recibe el título Lenguas maternas y otros relatos, y está compuesto por originales que fueron escritos en el año 2018. En este caso, todas las voces que encontramos son femeninas y, como en el primero, se busca mostrar una perspectiva diversa y multicultural del género.
Antes de entrar a comentar los relatos, me gustaría destacar el prólogo y ese título que nos recuerda a una de las grandes del género: «El año que murió Le Guin». Como se comenta al principio del mismo, Le Guin fue una de las escritoras que renovaron el género; quizá por eso, y también por su calidad literaria y la profundidad con la que trabajaba todos los temas que trataba, es una autora a recordar, a leer y a reivindicar. De hecho, desde hace un par de años se están publicando en catalán muchas de sus obras, podemos encontrar muchos de sus ensayos en castellano (el último, El idioma de la noche. Ensayos sobre fantasía y ciencia ficción, publicado a finales de 2020 por Edicions Gigamesh) y se han reeditado en castellano algunos de sus títulos más emblemáticos. Por lo tanto, aquel que quiera recordarla, celebrarla y disfrutarla tiene un abanico amplio de posibilidades.
Tras explicar en el prólogo cómo ha ido el proceso de selección e informar al lector de aquellos títulos que se han quedado fuera, nos adentramos en una antología que nos muestra una ciencia ficción que sabe mezclarse con lo fantástico y lo insólito, que sabe jugar con la tecnología, la inmensidad del espacio y lo más íntimo, como el lenguaje, como esa lengua materna que encontramos en el título. De hecho, «Lenguas maternas», de S. Qiouyi Lu, es el primer relato de la antología, y es un acercamiento muy interesante al lenguaje, a lo que implica esa parte de nosotros con la que hemos crecido, con la que hemos definido el mundo y nos hemos definido a nosotros mismos. En una sociedad llena de desigualdades, ¿qué estarías dispuesto a hacer para que los tuyos pudieran aspirar a un futuro mejor? ¿Dónde nace nuestra voz? ¿Y nuestra identidad? El silencio y la importancia de la comunicación en un relato breve pero interesante.
Lo sigue «Haz como que no me has visto y yo haré como que no te he visto», de Maria Dahvana Headley, un relato de corte más fantástico, en el que nos encontramos con un mago de poca monta que vive a la sombra del gran mago que fue su padre y de la forma en que lo vio morir cuando él era pequeño. La magia, la capacidad de creer y de olvidar, la vida y la muerte, el miedo y el recuerdo son elementos que asoman en una historia donde el humor y lo absurdo también están presentes.
Retomamos la ciencia ficción de la mano de Kelly Robson y su «Intervención», un relato que construye una relación entre planetas bastante interesante y que ahonda en el papel que juega la maternidad, la crianza y la educación en este nuevo mundo, en este nuevo concepto de humanidad. Con un marco bien trabajado, donde quedan claras las dinámicas sociales, políticas y económicas de esta realidad, Robson habla también de la vejez, del rencor, de la xenofobia y la incomprensión entre iguales, pero sobre todo entre diferentes. Un curioso viaje a las relaciones humanas y cómo las construimos.
Simone Heller nos ofrece un viaje con un toque poético, melancólico en su prosa y en los paisajes que evoca. «Cuando no había estrellas» nos presenta a una tribu nómada que avanza desde hace tiempo en un viaje en el que dejan fantasmas y se encuentran fantasmas; unos fantasmas que no tienen nada que ver con la imagen típica de la casa encantada y sí con aquello que dejamos atrás, aquello que a veces no podemos comprender o hemos olvidado. Un relato que nos habla de los miedos que heredamos, de las tradiciones y el inmovilismo, de las estrellas y los horizontes que nos permiten soñar con mundos que no hemos visto. Con descripciones muy visuales, nos adentramos en una historia donde los propios relatos son importantes, donde las canciones que cantamos y las imágenes que construimos son otra manera de conocer, recordar y comunicarnos.
Cierra la antología «Widdam», de Vandana Singh, un relato que nos presenta un mundo asolado por la contaminación y el cambio climático, donde una monstruosa estructura tecnológica lo domina todo e ignora al pobre, al trabajador… al hombre. Con un toque simbólico y algunas imágenes a nivel visual muy bien conseguidas, nos permite avanzar por la historia a través de diferentes puntos de vista, y geografías, que nos hablan de máquinas inteligentes, códigos, lucha y tierra.
Una recopilación de cinco relatos que nos hablan de la esencia humana, de la pérdida de la identidad, de la incapacidad de comunicarse con el otro, de la muerte y la vida, del odio y el miedo al otro, a nosotros mismos, a las máquinas o a las consecuencias de nuestros actos. Una nueva ventana al universo de la mano de cinco mujeres de las que quizá podamos leer algo nuevo en breve.
¡Feliz lunes y felices lecturas!
Inés Macpherson