• Contacto
  • Cuentacuentos
    • Experiencia
    • Una muestra (videos)
  • Libros
    • El secreto de Lucía Morke
      • Noticias y reseñas sobre «El secreto de Lucía Morke»
    • Otras publicaciones
    • Santa Jordina
  • Presentación

Encuentosydesencuentos's Blog

~ Un paseo entre cuentos y libros con Inés Macpherson

Encuentosydesencuentos's Blog

Archivos mensuales: abril 2013

Un cuento para Sant Jordi

22 lunes Abr 2013

Posted by encuentosydesencuentos in Cajón de sastre, Cuentos

≈ 9 comentarios

Etiquetas

Isabel Alba, Sant Jordi, Un dragón para una princesa

UN DRAGON PARA UNA PRINCESA
De Isabel Alba. Ilustraciones de Jesús Gabán
©LIBRAIRIE LAROUSSE
EDI, 6, S.A. – 1982

dragon-rose

(imatge de http://bzonamarta.blogspot.com.es/2008/04/sant-jordi-malgrat-el-pas-del-temps.html)

Había una vez, hace muy poco tiempo, en un país lejano, un anciano rey que acababa de tener una hija.
La vieja corte gobernada por aquel rey conservaba sus antiguas costumbres; por eso necesitaban, para el bautizo de la niña, un par de hadas. Cuando el rey y la reina eran jóvenes se encontraban hadas, buenas y malas, por todas partes: en las cocinas, en las caballerizas, en los bosques… Hasta en los cuartos de la plancha. El mundo estaba repleto de hadas. Pero ahora que había tan pocas princesas ya no quedaba casi ningún hada. La mayoría se habían marchado a lejanas tierras en busca de nuevos trabajos; otras habían preferido estudiar, dedicarse al deporte o hacerse estrellas de cine.
Los reyes mandaron emisarios por todo su reino en busca de hadas; hasta se ofrecieron inmensas recompensas a quien encontrara alguna. Al fin, una mañana, se presentaron dos: una buena y otra mala, como debía ser.
Los reyes, contentísimos, lo prepararon todo para el bautizo. Hicieron invitaciones para sus amigos, organizaron un enorme banquete y compraron una cuna nueva a la princesita para tan importante día.
Las pobres hadas, aunque conocían perfectamente cuál era su obligación, estaban muy asustadas. Hacía tanto tiempo que no se dedicaban a su oficio que ni siquiera tenía ya varita mágica. Los reyes intentaron animarlas. Su trabajo era sencillo: sólo debían expresar un deseo cada una y ese deseo se tenía que cumplir por encima de todo. A eso se reducía la ceremonia.
Y llegó el gran día.
En el salón de palacio se habían reunido, desde horas antes de la fijada para el bautizo, todos los personajes importantes de la corte. Los reyes, sentados en sus tronos y con la cunita de la princesa a sus pies, esperaban muy emocionados el momento en que deberían aparecer las dos hadas.
Cuando éstas entraron en la habitación se hizo un profundo silencio. Había llegado la hora en que se decidiría el futuro de la princesa. Ambas hadas se acercaron a pasitos lentos a la cuna de la niña. Una vez allí, el hada mala, que sabía muy bien lo que tenía que decir porque lo había leído muchas veces en los cuentos, anunció en voz muy alta para darse más importancia:
-Yo, la única hada mala que queda en este reino, declaro que esta niña, al cumplir los quince años, será raptada por un terrible dragón.
A continuación todos esperaron las palabras del hada buena. Pero ésta, que ya era muy viejecita y estaba algo sorda, no sabía que le tocaba hablar.
El hada mala intentó hacérselo comprender por medio de varios codazos y, como no lo conseguía, le gritó:
-¡¡Te toca a ti!!
-¡Ah, sí! – dijo el hada buena -. Un príncipe rescatará a la princesa y se casará con ella.
Y por si acaso no lo habían oído, repitió muchas veces:
-¡Se casará con un príncipe! ¡Se casará con un príncipe!

La princesa creció feliz hasta los quince años. Era muy inteligente y hermosa y esperaba impaciente el momento en que debería raptarla el dragón.
Pero pasaron los meses y ningún dragón venía a buscarla. Luego pasaron los años, y el dragón continuaba sin aparecer. El rey y la reina estaban desesperados. Si no encontraban pronto un dragón que quisiera secuestrar a la princesa, ningún príncipe vendría a salvarla. La princesa no tendría otro remedio que quedarse siempre en el castillo, soltera y aburridísima.
El problema era que en el mundo ya no quedaban dragones. Por más que habían buscado, no habían encontrado ninguno. Los habitantes de aquel país, que querían mucho a los reyes y a la princesa, se pusieron a pensar y a pensar para encontrar una solución a tan grave problema. Por fin decidieron que, si ya no existían dragones, lo único que se podía hacer era fabricar uno. La técnica estaba muy adelantada, no sería difícil hacer un robot-dragón. Y dicho y hecho. Escribieron a una importante fábrica de robots y ésta les envió las instrucciones sobre «cómo hacer un dragón moderno en su propia casa». El pueblo entero se puso manos a la obra y en menos de un mes había fabricado el dragón más asombroso que jamás se ha visto sobre la tierra. Se trataba de un robot-dragón gigantesco, con mando a distancia. No echaba fuego por la boca como los antiguos dragones pero tenía todas las ventajas modernas. Era capaz de lavar en pocos minutos la ropa sucia del país y repartirla casa por casa limpia y seca en menos de una hora. Llevaba incorporado un despertador electrónico, un radio cassette y hasta televisor en color, y diversos videojuegos para que la princesa no se aburriera mientras tuviese que estar con él en espera de que el príncipe la rescatara. Además, sabía cantar, bailar, tocar el violín y la guitarra eléctrica y hacer fuegos artificiales.
El pueblo estaba encantado con él. En pocos días, no sólo había raptado a la princesa, sino que también había ayudada a las amas de casa en sus trabajos, había entretenido a los niños y había dado tres conciertos en la plaza. Sólo faltaba que el príncipe viniera a rescatar a la princesa.
No muy lejos de allí vivía un rey que tenía un único hijo llamado Penduro. El rey estaba tan harto de la inutilidad de su hijo – que era bastante bruto – que, al enterarse de que al fin la princesa había sido raptada por un dragón, no dudó un minuto y envió a Penduro a salvarla. Casarle con la princesa sería una gran suerte.
Penduro llegó una mañana al país vecino dispuesto a matar a su temible enemigo. Llevaba armadura, espada y escudo. Cuál no sería su sorpresa al encontrarse con que el reino estaba de fiesta. El dragón paseaba por las calles llevando sobre su lomo a la hija del rey. Todos le aclamaban a su paso. Nunca en aquel país había reinado de tal forma la alegría ni se habían divertido tanto como desde la fabricación del robot-dragón.
La aparición de un príncipe dispuesto a terminar con el dragón desagradó hasta a los mismos reyes. Solamente la princesa estaba contenta. Al fin un príncipe, un príncipe de verdad, había venido a rescatarla y a casarse con ella. El combate entre el dragón y su futuro esposo debía celebrarse lo antes posible.
No hubo manera de convencerla de lo contrario; además, no se podía contradecir a las hadas que, cuando ella nació, habían decidido su destino. La lucha se fijó para la mañana siguiente. Pero había un problema. El dragón era de hierro y el príncipe jamás podría vencerlo. Había que buscar un tipo de lucha más igualada. Al fin, alguien tuvo una idea: se jugarían a la princesa al ajedrez. El dragón era un gran jugador de ajedrez y el príncipe tampoco lo hacía mal.
A la mañana siguiente todo el pueblo acudió a la plaza. Allí, en presencia del rey, la reina y la princesa, que estaba muy emocionada, se celebraría el combate. La partida fue reñida. Al principio iban igualados. Luego, el dragón, para darle mayor emoción al juego, permitió al príncipe que le ganara durante un ratito para vencerle al final.
Los habitantes de aquel país eran felices. Su robot-dragón había ganado. El príncipe no tendría más remedio que irse y dejarles en paz. Todo volvería a ser como en los últimos días. Para celebrarlo, tiraron serpentinas e hicieron una fabulosa fiesta.
Pero la princesa no estaba satisfecha. No había derecho a que por culpa de aquel dragón tuviera que quedarse sola y aburrida para siempre. Las hadas habían asegurado que se casaría con un príncipe y no podían equivocarse. El príncipe tampoco era feliz. Le gustaba la princesa y jamás podría volver a su reino sin ella. Su padre se enfadaría con él y le echaría de palacio. Por eso, decidió quedarse durante unos días en aquel país para ver si daba con alguna solución. Y la solución no se hizo esperar.
Una mañana, cuando la reina fue a despertar a la princesa, vio que ésta no estaba en su cama. La buscó por el palacio; la buscó por el jardín; la buscó por todo el pueblo y no la encontró.
Miles de mensajeros fueron de un lado a otro preguntando por ella a todo el mundo. Alguien tenía que haberla visto por alguna parte.
Una mañana apareció un pastor que sabía dónde estaba la princesa. Penduro, el príncipe, se la había llevado a lomos de su caballo blanco en dirección a su reino. El rey y la reina escribieron al padre de Penduro y éste les contestó que la princesa y su hijo se habían casado y vivían felices en su palacio. Los reyes y todos sus súbditos quedaron muy satisfechos. Las cosas se habían solucionado al gusto de todos:

Ellos tenían su dragón y la princesa tenía su príncipe.

«La espuma de los días» llega a la gran pantalla.

16 martes Abr 2013

Posted by encuentosydesencuentos in Cine

≈ Deja un comentario

Etiquetas

Audrey Tautou, Boris Vian, La espuma de los días, Michel Gondry, Romain Duris

El director francés Michel Gondry, un virtuoso de la imagen que ha trabajado tanto en el cine como en el mundo musical realizando videos musicales y que en 2004 nos regaló la inigualable ¡Olvídate de mí! (Eternal Sunshine of the Spotless Mind), recupera su extraordinario talento visual para llevar a la gran pantalla una de las novelas del fascinante escritor Boris Vian. Se trata de la adaptación cinematográfica de La espuma de los días (L’ecume des jours, que en inglés se estrenará bajo el título Mood Indigo), que ya había sido llevada a la gran pantalla en 1968, por Charles Bermont. Gondry cuenta con actores de la talla de Romain Duris, Audrey Tatou, Gad Elmaleh y Omar Sy (al que todos descubrimos en la entrañable Intocable).

l'ecume des jours

La espuma de los días muestra un mundo imaginario fascinante, fruto de la mente surrealista de Boris Vian, donde se puede viajar en una nube rosa o patinar, caminar o volar hacia atrás y donde las máquinas de escribir viajan en cinta transportadora. En este mundo, el joven Colin (Romain Duris) quiere enamorarse. Con la ayuda de sus amigos, conocerá a Chloe (Audrey Tautou), la encarnación de una melodía de Duke Ellington. Pero poco después de la boda, Chloe cae enferma. Y es que un nenúfar está creciendo en su pecho. Una enfermedad inusual que necesitará un tratamiento inusual.

Creada con unas imágenes fascinantes, la mejor manera de acercarse a esta historia es a través del tráiler, en el que podemos contemplar algunos de los cuadros visuales que Gondry ha preparado para plasmar la novela de Boris Vian.

Espero que llegue pronto a España y podamos sumergirnos en este peculiar universo onírico y musical.

Searching for Sugar Man

08 lunes Abr 2013

Posted by encuentosydesencuentos in Cine

≈ Deja un comentario

Etiquetas

Searching for Sugar Man, Sixto Rodriguez

A finales de los años 60, en un pequeño bar de Detroit, dos productores se quedaron fascinados por las letras y la voz de un desconocido cantante: Sixto Rodríguez. Tras este descubrimiento, Rodríguez grabó dos discos que, según los productores, debían ser un éxito, pero no fue así, y el artista desapareció en la oscuridad. De hecho, se perdió en el olvido en Estados Unidos, y hubiese caído en el olvido definitivo si un vinilo no hubiese llegado a la Sudáfrica del Apartheid, donde, a través de grabaciones piratas, sus canciones llegaron a todo el país, convirtiéndolo en un fenómeno y, sobre todo, en inspiración e icono de la libertad y la lucha contra el “establishment”. Pero, ¿quién era realmente Sixto Rodríguez? ¿Y por qué desapareció? ¿Qué le ocurrió?

searching-for-sugarman-poster1

Estas son las preguntas que Searching for Sugar Man intenta responder de la mano de dos fans sudafricanos que decidieron descubrir la verdad sobre Sixto Rodríguez. No desvelaremos el resto del documental, pues es mejor ir de la mano de estos incansables detectives enamorados de la música de Rodríguez para descubrir la verdad y, de paso, ir descubriendo algunas de las canciones de este músico desconocido para mí, pero que tiene una extraña magia. Y si no, escuchad la canción que le da título al documental:

Este documental y su director, Malik Bendjelloul, ha ganado recientemente el Oscar al mejor documental. Y con razón. Se trata de un documental fresco, inspirador, realizado con un ritmo relajado y elegante, que va desgranando los pequeños secretos que envolvían la misteriosa figura de Rodríguez y la desconocida ciudad de Detroit, así como los entresijos de la industria musical que le tocó vivir a este cantante.

En una época donde la crisis golpea con fuerza, donde se ve que el sistema político y económico tienen muy pocas superficies limpias en las que sustentarse (por no decir ninguna, pues ya lo han manchado y envenenado casi todo), un documental como este es un pequeño rayo de luz por diversas razones. Por un lado, está lleno de luz, de creatividad, de arte, de crítica, de emotividad (que no drama) y de sinceridad, tanto visual como vital. Por otro lado, descubrimos la belleza que un hombre supo encontrar en la gris y pobre Detroit (una ciudad que se nos muestra llena de problemas y pobreza), la voz que le supo dar a la realidad a la que todo el mundo le daba la espalda, y la importancia que tiene la resistencia y la dignidad en momentos difíciles. De la mano de la revolución que supuso Rodríguez en Sudáfrica, descubrimos la importancia que puede llegar a tener una canción para cambiar la manera de ver y de pensar de las personas. El arte siempre tuvo algo de revolucionario, y las canciones de Sixto Rodríguez tuvieron ese efecto.

Gracias a este documental, muchos descubrimos a un cantante completamente desconocido para nosotros y una ciudad que casi parece un fantasma en el mapa de las grandes ciudades de Estados Unidos (Rodríguez nació en Detroit, capital del motor, cuna de fábricas y de humildes proletarios estadounidenses y con una economía en tremenda recesión desde los años setenta).

Hay películas que uno no se creería si no le dijeran que son una historia real. Es el caso de Searching for Sugar Man, un pedazo de realidad y de canciones que nos demuestra que hay muchas maneras de vivir, de amar la vida y a uno mismo, y que la dignidad y la capacidad de ser uno mismo son muy importantes, más allá de las circunstancias que a uno le hayan tocado vivir.

“Porque he perdido mi trabajo / dos semanas antes de navidad / y busqué a Jesús en una alcantarilla / y el Papa dijo que ése no era su jodido asunto”. Una canción que contaba la realidad del momento y que cuenta la realidad de muchas personas hoy en día. La desesperación de las voces que nadie escucha y que Sixto Rodríguez convirtió en canción, en himno.

Este es uno de esos documentales que vale la pena ver y disfrutar.

Día internacional del libro infantil y juvenil: celebramos la fantasía

02 martes Abr 2013

Posted by encuentosydesencuentos in Actualidad, Cuentos

≈ Deja un comentario

Etiquetas

Día internacional del libro infantil y juvenil, El hombrecito del azulejo, Hans Christian Andersen, Manuel Mujica Láinez

¿Por qué el 2 de abril es el Día internacional del libro infantil y juvenil? Porque en 1805, tal día como ese, nació uno de los exponentes de la literatura infantil: Hans Christian Andersen. Por eso mismo, desde 1967, la Organización Internacional para el Libro Juvenil (IBBY, siglas del International Board on Books for Young People), un colectivo internacional de asociaciones y otras entidades y personas interesadas en fomentar la lectura entre los más jóvenes, promueve la celebración del Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil.

Dia_Internacional_dell_Libro_Infantil

Los libros son sueños, mundos mágicos o reales a los que nos adentramos en el momento en que los abrimos. La realidad siempre estará allí, esperando a que cerremos el libro; pero siempre podemos volver a ellos, sumergirnos en los laberintos de la imaginación. Para aprender a disfrutar de la magia de los cuentos y de los libros en todas sus dimensiones, ¿qué mejor manera que hacerlo desde pequeño, cuando la mente está más abierta a descubrir universos fantásticos? Después, de mayor, podrás seguir saboreándolos a cada página y sabrás que al otro lado del libro, un autor ha decidido regalarte un trozo de sueño, un universo distinto, mágico y ficticio en el que sentirte libre y volar, como Atreyu sobre Fújur.

Y para celebrar este día, un canto a la imaginación y a los cuentos de la mano de un gran escritor, Manuel Mujica Láinez, y de un cuento muy especial: El hombrecito del azulejo, una historia que nos habla sobre el amor y sobre cómo los cuentos y los sueños pueden sortear la realidad o enseñarnos a lidiar con ella.

http://www.literatura.org/Mujica_Lainez/hombrecito.html

Categorías

  • Actualidad
  • Actualidad editorial
  • Cajón de sastre
  • Cine
  • Cuentos
  • Lecturas y reseñas
    • Literatura juvenil
  • librerías
  • Poesía
  • Qué podemos contar…
  • Reflexiones
  • Serie TV
  • Sesiones de cuentos
  • Teatro
  • Un poco de historia…
  • Videos e imágenes

Archivos

  • octubre 2022 (1)
  • septiembre 2022 (2)
  • mayo 2022 (1)
  • marzo 2022 (1)
  • febrero 2022 (2)
  • enero 2022 (3)
  • diciembre 2021 (1)
  • noviembre 2021 (2)
  • septiembre 2021 (2)
  • agosto 2021 (1)
  • julio 2021 (4)
  • junio 2021 (2)
  • mayo 2021 (1)
  • abril 2021 (2)
  • marzo 2021 (3)
  • febrero 2021 (5)
  • enero 2021 (7)
  • diciembre 2020 (1)
  • noviembre 2020 (1)
  • octubre 2020 (3)
  • septiembre 2020 (3)
  • agosto 2020 (2)
  • julio 2020 (5)
  • junio 2020 (2)
  • mayo 2020 (4)
  • abril 2020 (2)
  • marzo 2020 (2)
  • febrero 2020 (2)
  • enero 2020 (5)
  • diciembre 2019 (2)
  • noviembre 2019 (5)
  • octubre 2019 (4)
  • septiembre 2019 (2)
  • agosto 2019 (1)
  • julio 2019 (3)
  • junio 2019 (2)
  • mayo 2019 (2)
  • abril 2019 (3)
  • marzo 2019 (4)
  • febrero 2019 (6)
  • enero 2019 (2)
  • diciembre 2018 (7)
  • noviembre 2018 (6)
  • octubre 2018 (6)
  • septiembre 2018 (3)
  • junio 2018 (3)
  • mayo 2018 (2)
  • abril 2018 (1)
  • marzo 2018 (2)
  • febrero 2018 (2)
  • enero 2018 (4)
  • diciembre 2017 (6)
  • noviembre 2017 (4)
  • octubre 2017 (2)
  • septiembre 2017 (5)
  • julio 2017 (2)
  • junio 2017 (2)
  • mayo 2017 (5)
  • abril 2017 (2)
  • marzo 2017 (3)
  • febrero 2017 (4)
  • enero 2017 (5)
  • diciembre 2016 (5)
  • noviembre 2016 (6)
  • octubre 2016 (4)
  • septiembre 2016 (4)
  • agosto 2016 (1)
  • julio 2016 (3)
  • junio 2016 (3)
  • mayo 2016 (5)
  • abril 2016 (5)
  • marzo 2016 (1)
  • febrero 2016 (2)
  • enero 2016 (3)
  • diciembre 2015 (2)
  • noviembre 2015 (2)
  • octubre 2015 (3)
  • septiembre 2015 (3)
  • agosto 2015 (1)
  • julio 2015 (1)
  • junio 2015 (4)
  • mayo 2015 (1)
  • abril 2015 (5)
  • marzo 2015 (3)
  • febrero 2015 (3)
  • enero 2015 (6)
  • diciembre 2014 (1)
  • noviembre 2014 (2)
  • octubre 2014 (5)
  • septiembre 2014 (9)
  • julio 2014 (3)
  • junio 2014 (9)
  • mayo 2014 (2)
  • abril 2014 (2)
  • marzo 2014 (6)
  • febrero 2014 (11)
  • enero 2014 (8)
  • noviembre 2013 (5)
  • octubre 2013 (2)
  • septiembre 2013 (2)
  • agosto 2013 (4)
  • julio 2013 (3)
  • junio 2013 (1)
  • mayo 2013 (3)
  • abril 2013 (4)
  • marzo 2013 (5)
  • febrero 2013 (4)
  • enero 2013 (5)
  • diciembre 2012 (3)
  • noviembre 2012 (4)
  • octubre 2012 (2)
  • septiembre 2012 (6)
  • agosto 2012 (8)
  • junio 2012 (5)
  • mayo 2012 (3)
  • abril 2012 (4)
  • marzo 2012 (6)
  • febrero 2012 (2)
  • enero 2012 (2)
  • diciembre 2011 (2)
  • noviembre 2011 (1)
  • octubre 2011 (1)
  • septiembre 2011 (3)
  • julio 2011 (1)
  • junio 2011 (1)
  • febrero 2011 (1)
  • enero 2011 (4)
  • noviembre 2010 (1)
  • agosto 2010 (1)
  • julio 2010 (2)
  • mayo 2010 (2)
  • abril 2010 (2)
  • marzo 2010 (7)

Enter your email address to follow this blog and receive notifications of new posts by email.

Únete a otros 125 suscriptores

Blog de WordPress.com.

Privacidad y cookies: este sitio utiliza cookies. Al continuar utilizando esta web, aceptas su uso.
Para obtener más información, incluido cómo controlar las cookies, consulta aquí: Política de cookies
  • Seguir Siguiendo
    • Encuentosydesencuentos's Blog
    • Únete a 125 seguidores más
    • ¿Ya tienes una cuenta de WordPress.com? Accede ahora.
    • Encuentosydesencuentos's Blog
    • Personalizar
    • Seguir Siguiendo
    • Regístrate
    • Acceder
    • Denunciar este contenido
    • Ver sitio web en el Lector
    • Gestionar las suscripciones
    • Contraer esta barra
 

Cargando comentarios...